Por: Vanessa Pimentel Que ciertamente el estar solo o apartado de las personas no nos da ocasión de ejercer la tolarancia, la paciencia, ni el perdón. Una vez escuche decir que cuando David fue al rio a buscar las piedras con las que mataría Goliat, y posteriormente a sus cuatro hermanos gigantes, no escogió las primeras que vío. Escogió minuciosamente aquellas que por el roce con otras piedras, el paso del agua y el tiempo habia sido afiladas, desgastada y preparadas con el peso y tamaño adecuados para una ves colocadas en la onda fuesen un proyectil infalible y mortal. Tengamos la tolerancia para dejarnos moldear, esto nos daría la forma que nuestro DIOS necesita que tengamos para ser infalibles en Sus Manos.
Por: Vanesa Pimentel La tendencia general ante la aflicción, la perdida, el dolor y la enfermedad es hacer la consabida pregunta:¿PORQUÉ; PORQUÉ A MI? Como si hubiesemos dado por sentado que estamos excentos o librados de ciertas situaciones, problemas o tribulaciones. Ciertamente la aflicción no es agradable para nadie. Pero que tal si entendieramos que hemos sido llamados a buscar y encontrar el propósito a todo, especialmente a la prueba y la aflicción. Esto de ser seguidores de Cristo nunca ha sido algo común ni corriente. Entiende que tú Líder, siendo QUIÉN ES, lo soporto todo hasta la muerte en la cruz. Entonces, cambia la pregunta: ¿PARA QUÉ? ¿CON QUÉ PROPÓSITO? Comienza a cooperar con el proceso, quita la resistencia. Preguntate: ¿Porque NO a mi? Obtienes utilidad y función a través de la prueba y la aflicción. Nada de lo que vives, sufres, aprender y vences es para ti. Eres perfeccionado, purificado y afinado a través del fuego de la aflicción para ayudar a otros a los pequeñitos en la Fe que vienen detrás. Por: JNFR El amor es un espectro profundo y complejo. Se puede manifestar hacia diferentes personas en diferentes contextos y con diferentes intenciones. Inclusive la literatura ofrece diferentes formas de conceptuarlo para ayudarnos a comprenderlo. Cuando hablamos del amor romántico entre un hombre y una mujer, el psicólogo Robert Sternberg propone la teoría triangular del amor para intentar explicarlo de manera aplicable a nuestras vidas.
Él plantea que tres cualidades se manifiestan en el amor: la intimidad, pasión y el compromiso. La intimidad hace referencia al elemento emocional, todo aquello que tiene que ver con el sentimiento de cercanía, la conexión, el afecto y la confianza. Por otra parte, la pasión es el componente motivacional, relacionado a la atracción física y el deseo sexual hacia la otra persona. Por último, el compromiso es el elemento cognoscitivo que se enlaza con la decisión de amar y continuar en la relación a pesar de las dificultades y diferencias. De estas tres cualidades pueden surgir varias combinaciones que tiene a su vez un impacto en la relación positivo o negativo, pero la expectativa es que a la medida que las tres surgen combinadas se conseguirá el "amor consumado". Se espera que seamos capaces de alinear nuestros sentimientos, deseos y pensamientos de manera balanceada para llevar al éxito en la relación. La teoría nos revela claramente que las relaciones amorosas ameritan dedicación y esfuerzo. No es suficiente decir te amo y que siento una gran deseo por la persona. Es necesario traducir estos elementos en acciones coherentes y congruentes con nuestra pareja. Para lograr el ideal del "amor consumado" se necesita esfuerzo tanto del hombre como de la mujer para construir una relación balanceada, la cual se traduce a una saludable. Sternberg creía que lo más difícil no es llegar al "amor consumado", sino mantenerlo. Así que, a pesar de que discutimos muy poco acerca del fenómeno del amor y hay muchos otros elementos influyentes no mencionados, podemos concluir que no es un simple sentimiento. Sino que el amor es una jornada, un camino con altas y bajas que se recorre con nuestro cónyuge con la intención de terminarlo exitosamente. Por: JNFR Nuestros niños y adolescentes tienen derechos jurídicos y legales. Existen muchas leyes, cartas de derecho y hasta la misma constitución de Puerto Rico y Federal, que velan por el trato justo para ellos. Pero en los últimos años nos hemos visto en la lucha en contra de diferentes proyectos de ley, intentos de enmienda a la constitución y cartas circulares del Departamento de Educación, que los amenazan en gran manera. Es así como el Estado comienza a enviar un mensaje incongruente, donde muestran una cara a la ciudadanía en sus discursos y campañas pero sus acciones no concuerdan. Es por esto que queremos reiterarles al Gobernador y su equipo gubernamental que sabemos que todas estas movidas van dirigidas a impulsar una agenda socio-política que favorece el discurso del género. Discurso que durante años este ministerios y muchos más han evidenciado que está dirigido a favorecer una ideología destructiva a cuestas del bienestar de la niñez, de la familia y del mismo orden que establece la naturaleza. Aun así, insisten.
Nuestros niños y adolescentes tienen derechos humanos. La Organización Mundial de la Salud (W.H.O., por sus siglas en inglés) define derechos humanos como las “garantías jurídicas universales que protegen a individuos y grupos contra acciones que interfieran en sus libertades fundamentales y en la dignidad humana”. Los elementos que sobresalen en esta definición son la justicia, universalidad, libertad y dignidad. Cuando hablamos de la adopción, entendemos que es un derecho para todos los niños el contar con la entidad de la familia, madre y padre. Pero cuando se trata de la adopción por parte de parejas del mismo sexo, las preguntas obligatorias serian: ¿A quién queremos beneficiar? ¿Los derechos de quien estamos velando? Claramente los últimos años de historia socio-política en Puerto Rico y EEUU nos evidencia que no es a nuestros niños. Así que estas medidas no cumplen con velar por el derecho humano que tienen los niños y jóvenes a tener una familia, compuesta por mamá y papá. Esto es un derecho universal, no importa si naces aquí o en Australia, tienes una madre y a un padre. Es la naturaleza. Se necesita un hombre y una mujer para crear vida, ¿Qué nos hace pensar que no lo necesitamos para mantenerla? Hablamos de vida de calidad, vida integral y de bienestar. No es justo ni es digno que el Estado use al sector más vulnerable e indefenso de la sociedad para adelantar una agenda maligna. La adopción no se trata de los adultos que quieren tener hijos, se trata de los hijos que necesitan a un padre y una madre, este es su derecho fundamental. Ya basta del discurso hipócrita y de usar a nuestros niños y jóvenes para sus intereses particulares. Esto es una violación a los derechos humanos. Ellos no tendrán una voz, pero nosotros sí, y no claudicaremos ante la opresión. |
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